Netflix está experimentando cancelaciones masivas por un boicot de Elon Musk al contenido "woke"
El 30 de septiembre de 2025, un clip de la serie animada Dead End: Paranormal Park se volvió viral en X. Este show, cancelado en 2023 pero aún en el catálogo de Netflix, incluye un personaje transgénero y mensajes pro-LGBTQ+, lo que desató críticas de cuentas conservadoras como Libs of TikTok. La controversia escaló cuando el creador del programa, Hamish Steele, publicó un comentario burlándose del asesinato de Charlie Kirk, una figura conservadora, llamándolo "nazi".
Elon Musk, con su masiva influencia en X, respondió al post de Steele tildándolo de "groomer" (un término usado por críticos para acusar a alguien de "adoctrinar" a niños) y confirmó que canceló su suscripción a Netflix. Su respuesta, vista por más de 15 millones de personas en menos de 24 horas, desencadenó una avalancha de usuarios anunciando cancelaciones con hashtags como #CancelNetflix. Publicaciones en español
¿Qué es "Woke"?
El término "woke" (despierto, en inglés) tiene raíces en la comunidad afroamericana de Estados Unidos, donde se usaba desde los años 30 para alertar sobre injusticias raciales y sociales. En los 2010, con el auge de movimientos como Black Lives Matter, "woke" evolucionó para describir a quienes están conscientes de temas como el racismo, el sexismo, la desigualdad económica y la discriminación contra la comunidad LGBTQ+.
¿Qué Sigue para Netflix y el Debate "Woke"?
Para Netflix, el desafío será balancear su compromiso con la diversidad sin alienar a una parte de su audiencia. Para los consumidores, el boicot plantea una pregunta: ¿es el contenido "woke" un problema real o una reacción exagerada?
El caso de Netflix refleja un choque cultural más amplio. Mientras algunos celebran la inclusión en el entretenimiento, otros sienten que se les impone una agenda que no comparten. La influencia de figuras como Musk, cuya sola publicación puede alcanzar millones, demuestra el poder de las redes sociales para amplificar estos debates.
Para Netflix, el desafío será balancear su compromiso con la diversidad sin alienar a una parte de su audiencia. Para los consumidores, el boicot plantea una pregunta: ¿es el contenido "woke" un problema real o una reacción exagerada?

