El presunto responsable, identificado como Eduardo Granados Palma, habría asesinado a su pareja sentimental, Astrid, y al hijo de ella, Angel Fernando Armenta Cruz. Además, dejó en estado crítico a Isabella Armenta Cruz, una niña de apenas 9 años, quien fue trasladada de emergencia para recibir atención médica.

El crimen ocurrió en el interior de una vivienda ubicada en el Coto Alicante, una zona residencial del municipio de Zapopan. Según los primeros reportes, el ataque habría sido producto de un conflicto personal, aunque las autoridades no han confirmado los motivos exactos detrás de este acto de violencia.

Este caso ha generado indignación y tristeza en la comunidad, recordándonos una vez más la importancia de prevenir y atender la violencia doméstica. Desafortunadamente, este tipo de tragedias no son aisladas en México, donde la violencia intrafamiliar sigue siendo un problema grave y recurrente.

Organizaciones civiles y expertos en el tema han reiterado la necesidad de fortalecer los mecanismos de protección para las víctimas de violencia doméstica, así como de promover una cultura de denuncia y apoyo psicológico para quienes puedan estar en situaciones de riesgo.